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«TORNAVIAJE». En el Museo Nacional

Dos cuadros de nuestro Museo Conventual en Madrid.

El lunes 4 de octubre, será inaugurada en Madrid, en el Museo del Prado, la Exposición “Tornaviaje. Arte Iberoamericano en España”. Será el Rey de España, Felipe VI, quien tenga el honor de inaugurar esta Muestra del Arte.

A partir del día siguiente, el público podrá tener acceso a dicha Exposición, y recrear en el tiempo aquellos momentos históricos en los que, a lo largo de nuestros Siglos de Oro, fueron llegando desde los virreinatos iberoamericanos espléndidas obras de arte que hoy se exponen a la vista y recreación de todos.

Se pueden contemplar dos lienzos de grandes dimensiones pertenecientes a nuestro Museo Conventual. Uno de ellos: “Nuestra Señora de Santa María de la Redonda” (mide 222 x 159’5 cm.) y el otro: “Divino Indiano. Cristo del Hospital de Jesús” (mide 240 x 174 cm.), ambos firmados y fechados por Antonio de Torres en 1716. En los dos casos representan, como “verdaderos retratos”, imágenes escultóricas de gran devoción en la ciudad de Méjico.

Según nos ha informado Javier Pantoja, Jefe del Área de Desarrollo Digital del Museo Nacional del Prado, uno de los proyectos en torno a esta Exposición es poder realizar una VISITA VIRTUAL 360º, para que, a través de la web, el público pueda acceder por este medio al disfrute de este evento cultural, por una tarifa reducida respecto a la entrada habitual.

Por supuesto, hemos recibido la Invitación formal para asistir a la Inauguración de la Muestra, gentileza del Ministro de Cultura y Deportes, el Presidente del Real Patronato del Museo del Prado, y la Presidenta de la Fundación AXA. Detalle que agradecemos de corazón.

Cuando el próximo mes de febrero vuelvan a ocupar los dos huecos que ahora han dejado, lucirán espléndidos después de la profunda restauración a la que ambas obras de arte han sido sometidas. Hasta entonces, pueden visitarse en la capital, en el magnífico Museo del Prado, y en esta Exposición “Tornaviaje. Arte Iberoamericano en España”, que esperamos sea para afianzar lazos no solo culturales, sino también de fe y de humanidad.